Marca.- Edson abandonó el campo llorando y consolado por sus compañeros.
Un jugador del Olhanense, de la cuarta división de Portugal, fue expulsado por el árbitro del partido tras denunciar que había sido objeto de un insulto racista por parte de un rival durante el encuentro.
El centrocampista luso-guineano Edson Pires, del Olhanense, fue a hablar con el árbitro este domingo después de que Diogo Andrade, del Rabo de Peixe, supuestamente le profirió un insulto racista durante la primera mitad, a lo que el colegiado solo respondió que estaría «atento».
El jugador volvió a explicar la situación, tras lo cual el árbitro le mostró una tarjeta amarilla, seguida de otra y una tarjeta roja.
«Nuestro jugador fue al árbitro quejándose de que un rival le había dicho ‘negro de mierda’, y vio la tarjeta amarilla, que naturalmente lo dejó incrédulo, luego vio la segunda tarjeta amarilla y la tarjeta roja, algo surrealista y incomprensible», dijo Luís Torres, líder de la SAD do Olhanense.
Edson abandonó el campo llorando y consolado por sus compañeros, y el partido, ganado por el Rabo de Peixe por 0-2, se vio interrumpido durante 7 minutos, según informa el diario portugués «Record».
Luís Torres, responsable de la SAD do Olhanense, calificó el incidente a la prensa local como «algo surrealista e incomprensible» y adelantó que procederá con una protesta en la Federación Portuguesa de Fútbol.