Marca.- El club ya condenó en su momento el comportamiento de dos aficionados en el estadio del City, donde fueron identificados.
La UEFA no se anda con tibiezas a la hora de desterrar ciertos comportamientos de los estadios de fútbol, como es el caso del racismo. Cualquier conducta inapropiada será castigada con una sanción económica, llegando igualmente al cierre parcial o total de los estadios. Y el máximo organismo del fútbol europeo ha sancionado al Sevilla con 5.000 euros de multa por la actitud inapropiada de dos aficionados andaluces en el estadio del Manchester City, dirigiéndose de forma ofensiva al joven Rico Lewis, quien anotó un gol esa noche (3-1). El club de Nervión ya condenó esa actitud de dos seguidores en su momento con un comunicado oficial. La UEFA, igualmente, advierte del cierre parcial del estadio (con hasta 1.000 asientos menos) en el caso de que se repitan conductas parecidas, con una vigilancia exhaustiva los dos próximos años.
El propio Sevilla ya ha tenido otros episodios parecidos, de propuestas de cierre parcial de su estadio, pero en este caso en el fútbol nacional, como los gritos o insultos contra Sergio Ramos en un partido de la Copa del Rey. De todos modos, en Nervión se califica el hecho de «totalmente aislado», puesto que ni siquiera se realizó en su propio estadio y que se trata de dos aficionados que fueron identificados sobre la marcha. Igualmente, vuelven a condenar cualquier acto o insulto racista dentro de un recinto deportivo, donde debe garantizarse la limpieza de la competición en el césped y en las gradas.
El Sevilla también ha salido al paso de esta sanción por parte de la UEFA y de la advertencia de un posible cierre parcial, en el primer partido que juegue como local en Europa, si se repiten hechos como los comentados anteriormente. Un comunicado oficial que dice lo siguiente: «El Órgano de Control, Ética y Disciplina de la UEFA (CEDB) ha tomado la decisión de multar al Sevilla FC, en su partido ante el Manchester City del pasado 2 de noviembre de la Liga de Campeones, con 5.000 y la amenaza de cierre parcial del al menos 1.000 asientos del Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán por el comportamiento racista de uno de sus seguidores en el Etihad Stadium.
El Sevilla FC, por su parte, ya identificó a través de su departamento de seguridad al aficionado, al que abrió expediente concluido con su expulsión como socio blanco de la entidad, en la cual se había dado de alta hace poco más de dos meses. La amenaza de cierre se convertirá en clausura real en el caso de que durante los dos próximos años a contar desde esta resolución se vuelvan a repetir comportamientos racistas. El Sevilla FC condenó un día después de la disputa de este partido el comportamiento racista de este socio, que gracias a las imágenes facilitadas por el Manchester City en el seno del expediente ha podido ser identificado.
El club quiere dejar constancia de su compromiso de tolerancia cero con cualquier conducta discriminatoria que tenga lugar tanto en su estadio como en las zonas de afición visitante cuando juega a domicilio. Igualmente, el club recuerda que en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán jamás ha habido episodios racistas o xenófobos y su afición, tanto en casa como fuera, se ha significado siempre en la lucha contra el racismo».