Cadena Ser – La aporofobia, el odio a los pobres, es la gran oculta en los delitos de odio
Según datos del Ministerio del Interior de los 28 delitos de odio registrados en Málaga en el año 2021, última estadística cerrada, ninguno de ellos fue por aporofobia, es decir por odio, aversión o rechazo hacia las personas en situación de pobreza.
De hecho, la mayoría de ellos tuvieron relación con la orientación sexual o la raza de la víctima.
El Ministerio del Interior define que en los casos de aporofobia la motivación del hecho debe ser el odio o rechazo al pobre y recoge aquellas expresiones y conductas de intolerancia referidas al “odio, repugnancia u hostilidad ante el pobre, el sin recursos y el desamparado”.
En todo el territorio nacional se registraron diez casos de aporofobia, el ochenta por ciento de las víctimas eran hombre, la mitad de estos casos fueron resueltos por las fuerzas de seguridad del estado que detuvieron a siete varones como presuntos responsables.
Málaga, según la Fiscal delegada de Delitos de Odio en Málaga, Maye Verdugo, no es una ciudad en la que destaque la incidencia de este tipos de delito, entre otras cosas, por el carácter cosmopolita de la provincia y la aporofobia no ocupa un lugar relevante en número en estos tipos de delitos ya que apenas supone el 0.55 por ciento del total de los casos por delitos de odio según las estadísticas oficiales.
Pero estas estadísticas pueden no reflejar la cruda realidad que rodea a los «sin techo» empezando porque la mayoría de ellos no suelen denunciar las agresiones, físicas o verbales, por temor o miedo tanto a sus agresores como a un sistema del que se mantienen apartados, apostilla Mayte Verdugo.
De hecho, la asociación «Hogar Sí» mantiene que el 47 por ciento de las personas sin hogar ha sufrido delitos de odio pero apenas denuncian 13 de cada 100 víctimas y eso que la mayoría de ellas han sufrido agresiones en más de una ocasión. Tampoco ayudan los testigos, apenas tres de cada diez hicieron algo por evitar la agresión a una persona sin hogar. En este sentido, la Fiscal de Delitos de Odio recuerda que estas agresiones son perseguibles de oficio una vez denunciadas o aportados vídeos o pruebas de la presunta agresión aún sin que se conozca la identidad de la víctimas o el agresor.
Según la estadística de esta oenegé, la mayoría de las víctimas son hombres entre los 18 y los 35 años. Las agresiones suelen producirse de noche y en el sesenta por ciento de los casos en el lugar donde duermen en la calle los «sin techo».
La Agrupación de Personas sin Hogar de Málaga, que reune a 14 entidades sociales ha cifrado en al menos 150 las personas viven en las calles de la capital, el ochenta por ciento de ellos hombres y un aumento progresivo de mujeres.
Desde mayo de 2021 la aporofobia está contemplada como agravante en el Codigo Penal.