El Mundo.- La Fiscalía ha interrogado por un posible delito de odio al ex estudiante del colegio mayor Elías Ahuja que, el 2 de octubre de 2022, lideró un cántico colectivo en el que residentes del colegio se asomaban a las ventanas de sus habitaciones y llamaban «putas» y «ninfómanas» a chicas de otro colegio mayor ubicado frente a su residencia.
Un incidente que se hizo viral después de que se difundiera el vídeo en las redes sociales, y que levantó una gran polvareda mediática y política, llevando a pronunciarse en tono de condena incluso al propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que lo calificó como «comportamiento repugnante».
El universitario, estudiante de Derecho y ADE, prestó declaración durante la tarde del martes en una de las dependencias judiciales de Palma, ciudad en la que reside después de su expulsión temporal del centro y de haber dejado de estudiar en Madrid por el incidente. En su comparecencia negó haber tenido intención de ofender a nadie y afirmó que fue sólo una broma.
El ex colegial del Elías Ahuja fue interrogado por videoconferencia durante media hora por la Fiscalía, que abrió diligencias de investigación tras recibir una denuncia de la asociación Movimiento contra la Intolerancia días después de los hechos.
Este colectivo considera que el cabecilla de aquel cántico pudo incurrir en un delito de odio, amplificado tras la difusión del cántico en redes sociales, donde rápidamente se convirtió en viral.
La denuncia sostiene que aquellos hechos, debido especialmente a su gran repercusión, «posibilitan el desarrollo de una subcultura machista que daña a la dignidad de todas las mujeres».
LA LETRA
En el vídeo, que enfoca la fachada del edificio residencial del colegio Ahuja, se puede ver cómo primero una voz (la del denunciado) jalea al resto de estudiantes y dice, desgañitándose: «Putas, salid de vuestras madrigueras como conejas, sois unas putas ninfómanas, os prometo que vais a follar todas en la capea, ¡vamos Ahuja!». A continuación, decenas de estudiantes abren sus ventanas y profieren gritos guturales.
A raíz de la denuncia de Movimiento contra la Intolerancia, la Fiscalía abrió diligencias. Ha sido el departamento de ciberodio de la Fiscalía el que ha asumido el caso, que todavía está en fase de investigación preliminar y no ha sido denunciado ante un Juzgado.
SU DEFENSA
En su declaración, según han confirmado fuentes próximas a la investigación, el ex colegial ha explicado que en ningún momento tuvo intención de ofender a las estudiantes a las que iban dirigidos aquellos gritos, las alumnas de la residencia femenina Santa Mónica, ubicada frente a la sede del Elías Ahuja. Su defensa alega en su descargo que las propias alumnas destinatarias del cántico no se sintieron perjudicadas.
El joven, al que defiende el abogado Jaime Campaner, ha defendido que fue una broma y que no fue algo ideado por él sino que él siguió una vieja tradición entre los alumnos del colegio mayor. Explicando que, por las características de su voz, fue el elegido para liderar el cántico, cuyo contenido generó una encendida polémica y una condena colectiva tras difundirse en las redes una grabación.
El propio colegio mayor condenó enérgicamente los hechos, identificó a los responsables y adoptó medidas disciplinarias.
El universitario investigado ha sostenido igualmente que no existía la intención de difundirlo en redes ni darle más amplificación sino que era un cántico dirigido a sus vecinas de la residencia de Santa Mónica.