La Guardia Civil ha detenido al menos a 17 jóvenes, dos de ellos menores de edad, como integrantes de una organización ultra que actuaban en la zona noroeste de la región. Están acusados de intento de homicidio ya que quisieron quemar vivo a un indigente en una zona cercana a Villanueva de La Cañada, según fuentes de la investigación. También se les imputan delitos de lesiones por ataques a inmigrantes y delitos contra los derechos y libertades fundamentales. Asimismo se les podría vincular con un delito de asociación ilícita, si se demuestra que se reunían con el fin de cometer actividades delictivas.
A tenor de las primeras pesquisas, los detenidos llegaron incluso a grabar algunas de sus acciones violentas. Los agentes requisaron en los registros varios teléfonos y material, en los que podrían estar recogidas las agresiones. Varios de los arrestados ya han sido detenidos en otras operaciones contra la violencia nazi en Madrid por actos similares.
Las detenciones se han producido a lo largo del fin de semana en municipios de Villaviciosa de Odón, Boadilla, Majadahonda, Pozuelo, Villanueva del Pardillo, Valdemorillo y Las Rozas. Todos los arrestados pasarán hoy a disposición judicial.
Las pesquisas las ha llevado a cabo el Servicio de Información de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, tras varios actos que revelaban la implicación de los detenidos en diversas agresiones a ciudadanos extranjeros. Además, en los últimos meses, estos actos violentos habían aumentado en esta parte de la región de forma alarmante.
Las investigaciones permitieron localizar, identificar y controlar a varios jóvenes en la zona de Villaviciosa de Odón y Boadilla del Monte. Eran miembros de un grupo de ideología nazi. Alguno ya había formado parte de otras facciones ultras. Uno de ellos incluso tuvo relación con la autodenominada banda Hammerskin desarticulada por la Comandancia de la Guardia Civil.
Los agentes decidieron establecer un dispositivo discreto de vigilancia en la zona, para conocer los movimientos de los cabecillas del grupo. A raíz del seguimiento a estos individuos, la Guardia Civil localizó al resto de integrantes de la célula. Solían actuar los fines de semana y casi siempre de noche.
Uno de los casos que se le atribuye a esta organización neonazi es el intento de homicidio de un indigente que dormía en un descampado. Los jóvenes ultras trataron de prenderle fuego pero el hombre pudo reaccionar y escapar. Su testimonio fue clave en el transcurso de las pesquisas, ya que la víctima pudo ver cómo una de las personas trataba de grabar las imágenes con un teléfono móvil de color rojo.
Los agentes de la Guardia Civil realizaron durante todo el fin de semana varios registros domiciliarios e intervinieron algunos efectos a los detenidos.
Se trata ahora de averiguar si los integrantes del grupo formaban parte de una estructura jerarquizada y piramidal, en la que cada uno desarrollaba un actividad dentro de la propia banda. No es la primera vez que la Guardia Civil actúa contra grupos neonazis en la zona noroeste de la región. En Villaviciosa de Odón fueron arrestados, en 2008, seis skin por sus continuas agresiones a extranjeros e indigentes.
Disueltos
Hay que recordar que los magistrados de la sección tercera de la Audiencia Provincial de Madrid disolvieron, hace dos años una organización neonazi Blood and Honour España (Sangre y Honor) y condenaron a 14 de los 18 acusados a penas de cárcel que van de uno a tres años y seis meses de prisión. En la sentencia, los jueces consideran probado que Blood and Honour estaba incluida en el movimiento denominado skinhead (cabezas rapadas), «distinguiéndose sus miembros por una vestimenta paramilitar»
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